Entrevista en El Correo
Aralar, una de las formaciones que mejor conoce y es más exigente con Batasuna -surgió a raíz de una escisión suya-, Aralar, ha alabado en los últimos días el documento sobre el que trabajaba la izquierda radical cuando fueron detenidos, entre otros, Arnaldo Otegi y Rafa Díez Usabiaga. La formación que preside Patxi Zabaleta ha criticado con dureza al Gobierno por, a su juicio, cercenar un «primer paso para transitar por la exclusividad de la política». La portavoz parlamentaria de Aralar, Aintzane Ezenarro, apuesta por «reconstruir la red de confianza» entre los nacionalistas tras el deterioro sufrido después de los fracasos de los últimos procesos de paz, «sin excluir a nadie».
-Su vicecoordinador, Jon Abril, ha dicho recientemente que «las detenciones y la configuración del Gobierno vasco pueden suponer un punto de inflexión para que los aber-tzales hagan los deberes».
-En nuestra ponencia del IV congreso está recogida la necesidad de ir buscando cómo tenemos que aglutinar el mínimo común denominador de los abertzales, siendo conscientes de que somos una mayoría en la Comunidad Autónoma Vasca y la segunda fuerza en Navarra. La situación que estamos viviendo en este momento puede acelerar este proceso, como se vio en la manifestación de San Sebastián.
-¿Cree realmente que hay base para esa unidad de acción?
-Hay que recuperar la red de confianza entre los abertzales, sin excluir a nadie. Tras los fracasos de los procesos de Lizarra y Loyola ha habido una ruptura de confianzas que creemos que hay que regenerar, porque es necesario de cara a un diálogo político entre todas las sensibilidades de este país. Los deberes de los abertzales son ponernos mínimamente de acuerdo entre nosotros.
-¿La situación actual perpetúa al PSE en el Gobierno?
-En absoluto. Algunos están intentando trasladar esta idea falsa. La ilegalización ha sido una de las causas que ha posibilitado que estemos como estamos, pero hay que recordar que por muy poco. Los abertzales representados en la Cámara concitamos más votos de ciudadanos que los constitucionalistas. Tendríamos que hacer las cosas muy mal para que en las próximas autonómicas no se refleje esta mayoría en el Parlamento vasco. Sería deseable que el mundo que representa Batasuna pueda ser una opción legal, pero aunque no se dé ese caso, el resto de aber-tzales tenemos que seguir caminando con ese objetivo. Tenemos que hacer posible el cambio de gobierno. Hoy en día la mayoría apostaría por el voto abertzale eficaz.
-¿Se han reunido con Batasuna?
-No. Hemos intentado varias veces tener una interlocución normalizada y no ha sido posible porque no han querido. Para recobrar confianzas perdidas es absolutamente necesario, por lo menos, hablar y vamos a seguir manteniendo ese intento. Para eso hay que empezar asumiendo la existencia del otro.
-Así, difícilmente se va a llegar a la unidad de acción entre abertzales.
-Pues habría que hacerla con el resto. Hay que impulsar la unidad abertzale estratégica, no hablo de opciones electorales ni de nada parecido. Hablo de garantizar unos mínimos comunes denominadores y, si algunos no quieren, tendrán que dar explicaciones. Si Batasuna no está, también puede darse la unión entre abertzales. Es lo que hicimos con la ley de consulta el año pasado. Si alguien quiere autoexcluirse, el resto tenemos que seguir haciendo camino sin esperar a nadie.
-En su ponencia política admitían las malas relaciones entre ambas formaciones.
-Representamos a un sector sociológico bastante similar, por lo que no es normal que no haya fluidez en nuestras relaciones.
-El mediador en conflictos Brian Currin pidió la semana pasada comprensión hacia Batasuna sin garantías a cambio.
-Yo sí creo en la honestidad de la iniciativa de algunos portavoces de Batasuna, muchos de ellos encarcelados. Pienso que era un primer paso para transitar hacia la exclusividad de la política y, en ese camino, Aralar colaborará ayudando en lo que haga falta.
-¿Tienen datos?
-Hay elementos nuevos en la autocrítica, cuando se habla de la necesidad de un proceso sin injerencias, aunque seguimos echando de menos que se establezca como punto de partida el rechazo a la violencia. Estamos dispuestos a ayudar en el tránsito, pero para cualquier colaboración, sea de tipo electoral -de una unificación de la izquierda abertzale futura-, incluso de tipo estratégico -de unidad aber-tzale-, se tiene que dar la condición de rechazo absoluto de la violencia.
-Las detenciones de Otegi y Rafa Díez Usabiaga han sido duramente criticadas por los abertzales.
-Creemos en la honestidad del proyecto. Las detenciones han intentado cercenar este camino, cuando lo que hay que hacer es empujar.
Autocrítica
-Aralar ha colocado pancartas pidiendo a ETA que pare y reclamando al Gobierno el acercamiento de los presos. Fueron toda una novedad.
-Desde el surgimiento de Aralar nuestras demandas eran una tregua y diálogo. Aralar ha defendido el activo del alto el fuego de ETA hasta el atentado de la T-4. A partir de ahí, pedimos claramente un cese unilateral de la violencia.
-Las pancartas fueron saboteadas.
-Por no quedarme con lo negativo, hay un cambio sustancial en relación a Aralar desde las personas que históricamente han sido militantes de Batasuna. Siempre puede haber excepciones que acudan a este tipo de actuaciones intolerables. Hay un cambio. De vernos como traidores a considerarnos como los sectores más cercanos, lo que es una realidad ideológica. Ser de Aralar no es de apestados, como lo ha sido en algunas localidades durante muchos años.
-¿Es un síntoma de que tendrán que hacer mucha pedagogía de puertas adentro?
-Lo están intentando. Hay que tener en cuenta que estos procesos son complicados. Para mí llega tarde, pero es mejor que sea tarde que nunca. Me parece intolerable la actitud del PSOE, sobre todo de Eguiguren, cuando dijo que 'están con esquemas de hace veinte años'. Es decir, lo que pudo valer para Aralar hace diez años no vale para Batasuna. No digo que hayan llegado al punto que llegó Aralar, pero es el inicio. Hace dos años era el camino que había que recorrer y ahora como no le interesa, ya no vale. La postura del PSOE es cínica y excesivamente frívola. Me parece una irresponsabilidad enorme. Si se detiene a los que han iniciado ese camino, ¿cuál es la alternativa?
-¿Están haciendo el tránsito que Aralar hizo en su día?
-No han llegado a la reflexión de Aralar hace diez años, pero todo apunta a que esto es el inicio. Si ETA no transita con Batasuna, ésta tendría que romper, que es lo que Aralar hizo hace diez años.
-De lo que conoce del documento que están debatiendo las bases de la izquierda radical, ¿qué le diferencia del de Anoeta?
-Hay una autocrítica del proceso anterior en el sentido de decir que 'nos saltamos Anoeta y nos fuimos directamente a Argel'. ETA frenó su mesa hasta que hubiese un avance en lo político y esto se ve con una visión autocrítica. También admiten que tienen que adecuarse a los cambios sociales. La visión acrítica ante la violencia es cada vez menor. Ahora dicen que hay que dar este paso, a pesar de que no hay negociación. Se parece a lo que le pedimos todos, es decir, caminar hacia una decisión unilateral.
-¿Considera que hay un cambio de profundo calado o es más de lo mismo?
-No es más de lo mismo, el principio es honesto y los detenidos tenían una vocación real de llegar a la paz. Otra cosa es que estemos más o menos de acuerdo en cómo llegar a la paz. Aralar, en su día, creía que lo que aceleraba el proceso de paz era desmarcarse de una ETA que no quería oír a la mayoría de la izquierda abertzale. No es más de lo mismo, es algo nuevo que no se ha dejado hacer. Sin posibilidades de reunión y escucharse no hay contraste de ideas ni reflexión posible. Es una locura que todos los que se reúnan puedan ser detenidos.
-¿Un atentado de ETA cercenaría la reflexión?
-Se acabaría una nueva esperanza y se rompería la unidad de acción con Batasuna si no se desmarcase. Pero no funcionamos a golpe de atentados y repetimos lo mismo antes que ahora. El PSOE está en la dinámica de derrota de ETA, que era la postura que mantenía el PP. Nos acusan de 'batasunización', cuando los que se han movido han sido ellos.
0 comentarios:
Publicar un comentario